Raviolis caseros rellenos de cigalas



Para la pasta:
- 300 g de harina
- 3 huevos
- Pizca de sal
- Un chorrito de aceite de oliva virgen extra
Para el relleno:
- 12 cigalas frescas
- Perejil picado
- 1 diente de ajo
- 1 cda de aceite de oliva
- Sal y pimienta
Para la salsa:
- Cabezas y cáscaras de cigalas
- 200 g de tomate triturado
- 1 cebolla pequeña
- 1 diente de ajo
- 1 cda de alcaparras
- Aceite de oliva
- Perejil
- Sal y pimienta
En una mesa de trabajo, forma un volcán con la harina, añade los huevos y una pizca de sal. Amasa enérgicamente hasta obtener una masa lisa y homogénea. Envuelve en film y deja reposar al menos 30 minutos.
Retira con cuidado las colas de las cigalas (reservadas para el relleno) y guarda también las cabezas y cáscaras. Pica finamente las colas y condiméntalas con perejil, sal y pimienta; añade un chorrito de aceite si deseas una mezcla más suave.
Extiende la masa en láminas finas, coloca montoncitos de relleno sobre una mitad y cúbrelos con la otra. Presiona bien alrededor y corta los raviolis con un cortador o cuchillo.
Exprime ligeramente las cabezas en un bol para extraer sus jugos. Hiérvelas junto con las cáscaras para sacar todo el sabor y agrégalas a un sofrito de aceite, cebolla, guindilla y ajo. Incorpora el tomate triturado, restos de cigalas, alcaparras y perejil. Cocina a fuego lento 15-20 minutos, ajustando de sal y pimienta.
Cuece los raviolis en abundante agua con sal durante 3-4 minutos, hasta que suban a la superficie. Escúrrelos con cuidado.
Sírvelos con la salsa caliente y, si deseas, añade un poco de perejil fresco picado.